sábado, 15 de diciembre de 2007

Cena de Navidad


Ya están aquííííí….
Ya han dado comienzo: las comidas o cenas de Navidad de las empresas. Yo acabo de llegar de mi primera. Y digo bien, mi primera, que todavía me quedan, que yo sepa, dos, y aún caerá alguna más.

La de hoy ha sido cena, en el Oh Mamma Mia, con mis compañeros del SIDRI. En nuestros sitios hemos encontrado un accesorio para ponernos durante la cena y posterior fiesta. Las típicas antenas con bolas, los cuernos de reno y el gorrito de Papá Noel con trenzas. A mí me ha tocado esto último, pero me he hecho con un par de antenas pa llevármelas a Yecla la semana que viene. En las mesas de abajo, estaba la cena de los de la 7, el canal autonómico y jolín, nosotros hemos montao escándalo, pero es que ellos…

En mi cena me he reído mucho, he hablado mucho y, por supuesto, he comido mucho, lo raro habría sido lo contrario. Tienen en el Oh Mamma Mia unas rosquillas chikiticas viciosas, de esas que podrías comerte un trillón. También te ponen junto a los cubiertos un paquetico de grissini… esos también han caído a la de tres. Y es que hemos tardao mucho en empezar a cenar.

Las jefazas han pedido unas ensaladas al centro… Si no recuerdo mal, se llamaba “Ensalada Capricciosa”. Capricho del chef ponerle ese nombre, porque en mi pueblo a eso se le conoce como una ensalada mixta con atún. Mala elección.

Como plato fuerte me he pedido unos Tortellini Boscaiola, un favorito en las cenas de amigas de los domingos o en casa de Sonia. La Boscaiola consiste en una salsa de nata, champiñones y panceta. A la mierda el régimen. Por una vez no me he pedido los Spaghetti Profumo d’orto, que son los de las verduritas.

Mis vecinos de mesa han pedido mayoritariamente pizza: Quatro formaggi, Diavolo, una con Ruccola y jamón de Parma… Ana se ha pedido unos Penne al mascarpone… de esos he tomao nota pa mi próxima visita.

De postre, plato combinado: Tiramisú, Profiteroles blancos, Profiteroles con chocolate y Tarta de queso con arándanos. Los dos primeros: los más ricos.

Tras eso, entre los cafés y el limoncello llega la elección de Papá Noel y Mamá Noel. Justo los dos que yo había votado. Varios brindis, feliz navidad y a casa, que hoy no estoy yo pa fiestas. En el camino de vuelta no me he sentido sola. ¿Cuántas cenas habría esta noche? Menudo ambiente, cuánta gente, ya se huele a Navidad. No sé si estoy preparada.

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